Entendiendo “sexo” no sólo como un encuentro erótico entre dos o más personas si no también como la masturbación en solitario y el resto de prácticas sexuales, la cantidad de éste ha sido durante mucho tiempo tema de debate entre expertos en el asunto.
- ¿Por qué las personas mantenemos relaciones sexuales?
Por norma general, mantenemos relaciones sexuales solas o acompañadas debido al deseo sexual. Factores como la ideología, los valores, las creencias y las experiencias, también influyen de forma significativa.
- ¿Qué cantidad de deseo sexual es el normal?
“Normal” no hay nada. Me explico, el deseo sexual o libido varía considerablemente de uno a otro, por lo que aquello que una persona consideraría un deseo sexual “normal”, otra podría considerarlo excesivo e incluso insuficiente.
- ¿Tener poco sexo es insano? ¿Y tener mucho?
No hay estipulada una cantidad de relaciones sexuales adecuada. Sí se sabe, a nivel científico, que el sexo es sano ya que activa el riego sanguíneo, ayuda a reducir los niveles de estrés, ansiedad y el dolor de cabeza, fortalece el sistema inmunológico y favorece el sueño. Sin contar además, con la sensación de bienestar que produce la liberación de la hormona Oxcitocina tras el orgasmo.
- ¿Cuántas parejas sexuales son pocas o muchas?
Esta pregunta no tiene respuesta, ya que cada uno ha de ser consciente de con quién mantiene relaciones sexuales, si se siente a gusto con su vida sexual y si quiere seguir en la misma línea.
“Soy ninfómana”
Los conceptos como ninfomanía (para definir a la mujer que mantiene “muchas” relaciones sexuales) o satiriasis(para definir al hombre que mantiene “muchas” relaciones sexuales) ya no se usan en clínica puesto que están considerados como muy primitivos y estigmatizantes (están descatalogados del DSM, la “Biblia” de psicólogo y el psiquiatra). Ahora, en lugar de esos términos se usan otros como “hipersexualidad” o “trastorno hipersexual”.
- ¿Qué es la hipersexualidad?
La hipersexualidad hace referencia a una cantidad muy elevada de relaciones sexuales.
¿Esto significa que si mantengo relaciones sexuales todos los días soy hipersexual?
NO.
Para saber si una persona es hipersexual, o por el contrario, hiposexual, hace falta una exploración médica y psicopatológica a nivel individual. Y todavía mejor, si quisiéramos saber esto a nivel poblacional para sacar conclusiones más generales haría falta saber qué es la normosexualidad, y llegar a eso es MUY difícil. Es por ello, que los especialistas en sexología, intentamos marcar unos límites para diagnosticar exclusivamente el trastorno hipersexual.
- ¿Qué es el trastorno hipersexual?
Quitando los motivos médicos o psiquiátricos, cuando las relaciones sexuales de una persona o el proceso que lleva a conseguirlas (el ligoteo en persona o a través de Internet), le impiden llevar a cabo su vida cotidiana e interfieren en ella (trabajo, relaciones familiares y sociales), ella misma se dará cuenta de que algo está fallando.
¿Significa esto que si hoy he llegado tarde a trabajar porque me estaba masturbando tengo un trastorno hipersexual?
NO.
El trastorno hipersexual se caracteriza por, además de interferir en la vida cotidiana, realizar una cantidad considerable en una trayectoria de tiempo considerable de conductas sexuales que no son motivadas exclusivamente por el deseo sexual, sino que, lo que se busca al realizarlas es reducir la ansiedad o “escapar” de algún problema personal, aunque esto sea de forma inconsciente. Es por ello que aunque sí es importante la frecuencia de las prácticas sexuales, lo es más la insatisfacción que se experimenta después de realizarlas.
- ¿Puede resultar el sexo una adicción?
No. Al menos a mí no me gusta considerar un trastorno hipersexual como una adicción al sexo.
El objetivo en la intervención para una conducta adictiva es lograr una extinción de dicha conducta. Por ejemplo, una persona adicta al alcohol, deberá dejar el consumo de alcohol completamente en su proceso de curación. En el sexo es distinto, en una intervención de este tipo no se pretende que la persona deje de mantener relaciones sexuales para su recuperación, se pretende que las mantenga pero que resulten satisfactorias, por lo que la intervención va dirigida a mejorar otras áreas problemáticas relacionadas con el trastorno y que probablemente jueguen un papel mucho más importante que el sexo en sí.
Conclusión: Siempre que te sientas a gusto con tu forma de expresar tu sexualidad, tus relaciones y en especial contigo, no dejes de hacerlo porque alguien opine que tienes un problema por follar más de tres veces a la semana con distintas personas.
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